Un mes después de nuestras vacaciones veraniegas por los países bajos, volvimos a salir para visitar la localidad de Belmonte, esta vez acompañados por nuestro grupo de amigos
Viernes, 30 de Septiembre
Salimos el viernes por la tarde, llegando a Belmonte al oscurecer... nuestra llegada y la de todos nuestros amigos se produjo de forma escalonada (como es lógico) y los abrazos y besos de los que ya nos conocíamos anteriormente, se entrecruzaban con los saludos y presentaciones de los recién conocidos, mientras las autocaravanas iban rellenando el aparcamiento asignado.
Pasamos una velada estupenda en la que no faltaron la charla, las risas y las anécdotas. Aunque hacía algo de frío, nos mantuvimos charlando hasta bien entrada la madrugada....
Sábado, 1 de Octubre
Cuando llegamos el viernes, habíamos visto una churrería, así que el desayuno del sábado no podía ser otra cosa que churros, jejeje..
Como estaba previsto, subimos para llevar a cabo la visita al castillo de Belmonte... para ello cruzamos buena parte del pueblo...
y como el castillo estaba bastante arriba...
tuvimos que escalar una montaña para poder llegar a la entrada
costó lo suyo llegar a la cima, pero lo conseguimos, jeje...
y por dentro nos gustó muchísimo, el patio de armas extrañamente es triangular
después debíamos pasar a una sala de contenido audiovisual para conocer la historia del castillo desde sus comienzos
y luego continuamos con la visita subiendo para ver las dos plantas y el paseo de ronda del castillo
Daba gusto... todos tan atentos a las explicaciones...
para que luego digan que sólo nos gusta la juerga...
hasta los niños se interesaban por aprender
me encantó la decoración de todas las salas...
y desde lo más alto, las vistas eran impresionantes
El oxígeno, demasiado puro, jajaja... lo pasamos todos fenómeno...
Cuando terminó la visita y logramos llegar hasta las autos, ya era la hora del aperitivo, que preparamos aderezado con una riquísima cuerva
El caso es que "aperitiveamos" tanto, que ya nadie sacó la comida... así que optamos por dejarla para el domingo y pasar directamente a los cafés y una tranquila y relajada sobremesa
Las actividades previstas para la tarde las aplazamos hasta el domingo por la mañana debido a la visita de unas niñas de la localidad, que hicieron buenas migas con nuestros chicos y decidieron llevárselos por el pueblo y hacerles una visita guiada a su manera, por lo que les dejamos la tarde para que disfrutaran con sus nuevos amigos.
Mientras, los adultos alargamos la sobremesa hasta que decidimos que había que moverse para deshacer lo que habíamos comido, haciendo también una pequeña ruta para ver y callejear por Belmonte. Así que emprendimos una larga caminata por el pueblo con el fin de rebajar la comida y conocer los bonitos rincones de esta bella localidad.
un original trampantojo en una de las calles nos llamó la atención
y por supuesto, la Colegiata
en la que tuvimos oportunidad de hacer una visita guiada, de la que salimos todos impresionados.
También pudimos escuchar las distintas anécdotas que se cuentan acerca de la temporada que pasó el actor Charlton Heston viviendo en esta localidad, con motivo del rodaje de la película "El Cid", y que originó que este personaje conviviese estrechamente con el vecindario del pueblo, vecindario que guarda como un tesoro aquellas vivencias y las cuenta a todo aquel que está interesado en conocer parte de la historia de este bello pueblo.
Tras la Colegiata, nuevas vistas del castillo, ideales para hacer otra foto de grupo, aunque esta vez faltaban unos cuantos que se habían despistado...
Después del reconfortante paseo, todos a ponerse guapos y de cena en el restaurante...
lo pasamos pipa
y cuando terminamos, de vuelta a las autos... mientras los adultos nos relajábamos tomando unas copas, los más peques disfrutaron de una velada-concurso de cuentos de terror, en la que disfrutaron de lo lindo
Y todavía, antes de acostarnos, los más decididos salimos para hacer alguna foto nocturna del castillo... el caso era hacer alguna foto más, jeje
Domingo, 2 de Octubre
El domingo aprovechamos la mañana para realizar actividades y juegos con los niños, hubo desafíos y no faltó el juego de la comba
yo creo que no quedó nadie por saltar, jaja...
aunque al final nos apuntamos todos...
Al terminar las actividades ya era la hora de comer,
y entre unas cosas y otras, se nos hizo la sobremesa en un pis-pas
Después de la sobremesa, comienza la recogida y también las despedidas, cada uno de vuelta a su hogar... con un sabor de boca muy bueno por haber compartido un fin de semana encantador con gente estupenda, en un lugar precioso, como digo siempre, quejándonos de que ya terminó, pero felices porque ya estábamos maquinando la siguiente salida....
¡Genial!
ResponderEliminarMe acordé de D. Quijote, de los juegos de infancia y de las ilusiones ópticas.